A
través de eventos como Cumbre de la Tierra 1992, las naciones han acordado que
el desarrollo debe ser sustentable. Esto significa que la meta de las naciones
considera alcanzar el desarrollo económico y social sin degradar más el entorno
(recursos naturales), de manera que protejan los derechos y oportunidades de las
generaciones futuras, y a la vez, contribuyan a que en otras partes se adopten
métodos compatibles.
A
continuación, se presentan las tendencias y retos principales que se interponen
en la meta del desarrollo sustentable, mismos que han sido debidamente
analizados por iniciativas de evaluación mundial, no obstante, aún deben
superarse; y aunque comúnmente se enfocan en asuntos ambientales, sociales o
económicos, van adoptando una perspectiva más holística.
3.1. Crecimiento demográfico.
Hace
unos 250 años. Al igual que ahora, la humanidad también contaminaba, pero éramos
menos habitantes y con tecnología bastante limitada. Las alteraciones
ambientales ocasionadas por los habitantes de aquello años eran locales y,
generalmente estaban dentro de las posibilidades de la misma capacidad de
asimilación de la naturaleza para obtenerla. En estos dos siglos anteriores se
han producido cuatro sucesos que han originado problemas ambientales que superan
la capacidad de asimilación de la naturaleza. Primero, un crecimiento desmedido
de la población que ha creado enormes presiones ambientales. Segundo, este
crecimiento, en particular de los países más desarrollados, conlleva la
generación de nuevos procesos industriales que, con sus desperdicios, perturban
el ambiente. Tercer, el crecimiento demográfico y la industrialización han dado
origen a la urbanización; es decir, al movimiento de personas que emigran de
pequeños asentamientos a ciudades y pueblos, lo cual contribuye a acrecentar los
problemas ambientales en función de la densidad de personas e industrias. Y
cuarto, el crecimiento desmedido del uso de energía y la introducción de nuevos
productos, lo que ha acentuado más la tensión ambiental.
En
este mismo sentido, la Cumbre Mundial sobre Alimentación llevada a cabo del 13
al 17 de noviembre de 1996, en Roma, expreso:
“El
crecimiento Demográfico es la principal razón del aumento de las necesidades
alimentarias e intensifica la presión de los recursos naturales. Los países con
rápido crecimiento demográfico se enfrentan a dificultades especiales para
garantizar la seguridad alimentaria sostenible, está supeditada a la pronta
estabilización de la población mundial”
3.2. Contaminación del agua.
Los
problemas de contaminación del aguas se incrementaron después de la Segunda
Guerra Mundial, cuando se originaron aumentos en la densidad urbana y la
industrialización. La preocupación con la relación a la contaminación del agua
alcanzó un máximo a mediados de la década de 1970.
La
contaminación del agua es un término poco exacto que no proporciona información
acerca de la fuente de contaminación ni del tipo de contaminantes. El modo de
atacar el problema de los residuos que contaminan el agua depende de si los
contaminantes demandan oxígeno, que favorece el crecimiento de algas, si son
infecciosos, tóxicos o simplemente de aspecto desagradable. La contaminación de
nuestros recursos hidráulicos puede ser resultado directo del desagüe de aguas
negras o de descargas industriales (fuentes puntuales), o indirecta de la
contaminación del aire o de desagües agrícolas o urbanos (fuentes no
puntuales).
Los
controles jurídicos y económicos son algunas medidas que se emplean para
inspeccionar y controlar la contaminación del agua. Multas, recargos, incentivos
financieros, acuerdos de subdivisión y reglamentos para el uso de alcantarillas
son algunas de las herramientas disponibles.
3.3. Contaminación del aire.
Los
contaminantes presentes del aire son sustancias que, cuando están presentes en
la atmósfera, afectan de manera diversa la salud del ser humano (enfermedades,
hipersensibilidad), flora y fauna (reducción del crecimiento, pérdida de
especies); dañan materiales o interfieren con el disfrute de la vida y el uso de
propiedades. en ciertos casos no controlamos las emisiones de manera apropiada.
Debemos depender, entonces, de su dispersión y de los subsecuentes procesos
naturales de limpieza de la atmósfera para evitar concentraciones excesivas de
contaminantes, las cuales causarían efectos indeseables.
En
todo el mundo se ha puesto énfasis en el control de las concentraciones de
límites máximos permisibles de contaminantes atmosféricos a niveles en los
cuales se observan efectos en la salud. Ya que no resulta práctico eliminar
todas las emisiones de un contaminantes específico, tampoco es fácil controlar
la contaminación del aire. Sin embargo, es sensato esperar una regulación de
las emisiones hasta el menor nivel posible congruente con la tecnología de la
que se dispone y dentro de los márgenes de un costo razonable. En la práctica
suelen establecerse límites o estándares de control en lugar de estándares de
calidad del aire ambiental, porque para un organismo es más fácil hacer
respetar o cumplir los límites máximos permisibles.
Puesto
que la contaminación del aire es la consecuencia de la manera como se erigen
nuestras ciudades y constituye un residuo de los métodos de producción de
nuestras mercancías, mismas que transportamos junto con nosotros y de las
cuales, a su vez, generamos la energía para iluminar y calentar los lugares
donde habitamos, nos divertimos y trabajamos, la contaminación del aire se ha
vuelto un factor inherente a la vida moderna. La causa principal de toda la
contaminación del aires es la combustión perfecta o teórica del hidrógeno y el
carbono del combustible, el cual se combina con el oxígeno del aire; o bien,
temperaturas de combustión demasiado altas o demasiado bajas son causa de la
formación de productos secundarios, tales como monóxido de carbono, óxidos de
azufre, óxidos de nitrógeno, cenizas finas e hidrocarburos no quemados – todos
ellos son contaminantes del aire.
3.4. Residuos sólidos.
Los
residuos sólidos incluyen todos los materiales sólidos desechados de actividades
municipales, industriales o agrícolas. Según la Ley General para la Prevención y
Gestión Integral de los Residuos, se entiende que los residuos sólidos son
aquellos generados en las casas habitación, que resultan de la alimentación de
los materiales que utilizan en sus actividades domésticas, de los productos que
consumen y de sus envases, embalajes o empaques; los residuos que provienen de
cualquier otra actividad dentro de establecimientos o en la vía pública, que
generan residuos con características domiciliarias, y los resultantes de la
limpieza de las vías y lugares públicos. Las áreas residenciales y comerciales,
junto con ciertas operaciones industriales, son las fuentes de estos residuos
municipales “no peligrosos”.
La
caracterización de los residuos sólidos municipales es difícil a causa de la
variada composición de sus componentes, muchos de los cuales no se deberían
“desechar”. La administración de los residuos sólidos tiene como propósito el
control, la recolección, procesamiento, utilización y eliminación de los
residuos sólidos de la manera menos costosa, en conjunto con la protección de
la salud pública y los deseos de quienes atiende el
sistema.
Para
este fin, en 1989 la Environmental Protection Agency
(EPA; Agencia de Protección al Ambiente) de Estados Unidos adoptó una jerarquía
de prácticas de administración de residuos, las cuales estaban destinadas a
utilizarse como una guía para las comunidades durante la elaboración de planes
de generación de sólidos (EPA, 1989).
México
enfrenta grandes retos en el manejo integral de sus residuos sólidos municipales
(RS). Esto como consecuencia de un reto que ya hemos estudiado que es el elevado
índice de crecimiento demográfico e industrial del país, las costumbres de la
población, la elevación de los niveles de bienestar, así como la tendencia a
abandonar las zonas rurales para concentrarse en los centros urbanos. El manejo
deficiente de los residuos sólidos en nuestro país, lo que comprende las
diferentes fases del ciclo de vida de estos desde su generación, almacenamiento,
transportación, tratamiento y disposición en algún sitio, han provocado grandes
daños al ambiente, como la contaminación de suelos, aire y
agua.
3.5. Abastecimiento de agua.
Hablar
de abastecimiento de agua es mencionar temas relacionados con la calidad y
cantidad de agua requerida para satisfacer las diversas necesidades de la
sociedad. Entre esos temas están: los medios con los que se cuenta para mejorar
la calidad del agua que no ha sido tratada antes de ser desechada, la selección
de fuentes alternativas de agua, el transporte y la distribución del vital
líquido, con especial énfasis en el abasto público.
Para
llevar a cabo el abastecimiento del agua es necesario realizar actividades
humanas como:
La
irrigación hace posible la
agricultura y necesita un uso extractivo del agua de gran magnitud, de otro modo
no se podrían sustentar los cultivos.
El
uso del agua para el abasto público
requiere que el vital líquido sea limpio y seguro en los hogares, lugares de
trabajo, hospitales, actividades comerciales, protección contra incendios y
limpieza de calles. Es de importancia capital el agua utilizada para beber, para
la higiene personal y para fines sanitarios.
La
industria depende en alto grado de
un abastecimiento adecuado de agua que se utiliza como componente de productos
(por ejemplo, en bebidas, industria del papel) o de manera indirecta en el
control de procesos de producción, como de maquinaria para generar
calor.
3.6. Consumismo.
Este
reto del desarrollo sustentable está ligado al reto de generación de residuos
sólidos y el crecimiento demográfico, ya que el aumento de la población trae
consigo el aumento de consumo para cubrir las necesidades de los nuevos
pobladores, lo que, a su vez, genera mayor cantidad de residuos
sólidos.
En
general las poblaciones urbanas del mundo tienen un mayor consumo que las
poblaciones rurales. La población y el consumo son dos elementos que generan
impacto significativo adverso sobre el ambiente. El sobreconsumo de recursos
naturales y bienes materiales generan carga sobre los ecosistemas naturales, de
aquí la importancia de generar conciencia ambiental para fomentar un consumo
responsable con el medio ambiente y las economías, de modo que se alcance un
equilibrio entre consumo y bienestar social con el entorno
ambiental.
3.7. Deforestación.
El
reto derivado de la deforestación es la conservación de los recursos forestales
tanto para los países desarrollados y subdesarrollados, puesto que la
deforestación es la pérdida de bosques, lo que genera graves consecuencias como
la erosión de los suelos y, con ello, pérdida del terreno fértil, la pérdida de
flora y fauna, interrupción del ciclo del agua o el aumento de los niveles de
CO2 cuando se queman los bosques. Una sexta parte de la superficie
terrestre mundial se ha degradado como resultado de la ganadería intensiva y de
las malas prácticas del cultivo agrícola.
Las
políticas forestales expresan la preocupación internacional por las presiones de
la deforestación, incluyendo el comercio de maderas tropicales, la conversión de
bosques a usos agrícolas, así como los efectos de la deforestación sobre el
cambio climático, la biodiversidad de las comunidades locales dependientes de los
recursos forestales, conforme la deforestación causa la degradación del ambiente
natural. Por lo tanto, en la administración de los bosques intervienen
cuestiones relacionadas con la investigación sobre hábitats naturales y
prácticas silvícolas.
Para
analizar estos problemas se podría comenzar por revisar las clasificaciones
económicas de los usos de los terrenos forestales; en especial, los límites que
separan las clases de terrenos forestales, mismo que definen los cambios en los
niveles de deforestación y reforestación.
Este
análisis parte de la obra clásica de Von Thunen
(1875) sobre geografía económica de los bosques, ya que dicho autor concluye que
la escasez creciente resultado de la deforestación propiciaría incrementos en
los valores de los productos derivados del bosque, como la madera, leña, frutas,
forraje, además de favorecer al ambiente, lo que se refleja en cambio
climático, biodiversidad y control de la erosión. Todo ello, sostiene, volverá
competitivos a los bosques con respecto a algunos usos agrícolas del territorio.
Asimismo, el mundo evitará llegar hasta los límites físicos de la
deforestación.
3.8. Cambio climático.
El
término cambio climático no solo hace referencia a los cambios de temperatura,
ya sea el aumento o disminución del frío o calor en un determinado tiempo; el
cambio climático trata el proceso de calentamiento de la Tierra, el cual se
origina por las actividades que realizamos los seres
humanos.
El
crecimiento demográfico y de las ciudades ha originado el aumento de
combustibles fósiles, pues la contaminación producida por los automóviles y las
fábricas generan los gases llamados efecto invernadero, que se quedan en la
atmósfera y retienen el calor que emite la tierra después de calentarse por la
radiación solar. El aumento de la concentración de los gases efecto invernadero
produce incrementos en la temperatura del planeta y los cambios en el
clima.
La
degradación del medio ambiente con el consecuente cambio climático es un reto
ambiental que debe ser atendido por todo ser responsable, así como en la agenda
de cualquier gobierno, si no queremos desaparecer como especie del planeta
Tierra.
En
relación al reto cambio climático, México presentó su Plan Nacional de
Desarrollo (2013-2018), el contempla líneas de acción en materia de adaptación y
mitigación del cambio climático, así como compromisos unilaterales de reducción
de emisiones para el mediano y largo plazo. Los programas sectoriales de
energía, de comunicaciones y transportes, y de desarrollo social, también
incluyeron una descripción de acciones relacionadas con el cambio
climático.
3.9. Pobreza y marginación.
Entre
los principales retos concernientes a problemas sociales que México tiene que
vencer, destaca el tema relacionado con la pobreza y marginación, considerando
que la marginación es la exclusión social que se encuentra en desventaja de una
situación económica, estatutaria, política o profesional; y que la pobreza es
una situación de forma de vida que surge como producto de la imposibilidad de
acceso a los recursos para satisfacer las necesidades básicas que inciden en el
deterioro de la calidad y nivel de vida de los seres
humanos.
Baratz
y Grigsby (1971, pág. 120) definen a la pobreza como “una privación severa de
bienestar físico y bienestar mental, estrechamente asociada con inadecuados
recursos económicos y consumos”.
Y
se entiende por marginación a un
fenómeno multidimensional y estructural originado, en última instancia, por el
modelo de producción económica expresado en la desigual distribución del
progreso, en la estructura productiva y en la exclusión de diversos grupos
sociales, tanto del proceso como de los beneficios del desarrollo (CONAPO,
2012).
En
México, como en el resto del mundo, la marginación y la pobreza son problemas de
integración social, y cada una surge como efecto de la otra; entre mayor sea el
índice de pobreza en un lugar, el número de gente marginada aumenta y
viceversa.
3.10. Pérdida de biodiversidad.
Tanto
directa como indirectamente, la biodiversidad sustenta nuestra propia vida en la
Tierra, por lo que nos veríamos comprometidos como especie si desapareciera una
que fuera clave en algún proceso. Además de formas de vida atractiva, con la
pérdida de especies también se pierden agentes que nos defienden de plagas y
parásitos, otros que contribuyen en la producción de alimentos o madera, o bien,
aquellos que intervienen en la polinización de las cosechas o la purificación de
las aguas.
El
cambio de usos de suelo, el cambio climático, la deposición de nitrógeno, el
aumento de CO2 y las invasiones biológicas, figuran entre los
diversos factores que inciden en la pérdida de biodiversidad a nivel
global.
La
sustentabilidad busca solucionar la problemática ambiental de la vida en el
planeta, misma que consiste en encontrar formas para animales, plantas, seres
humanos y otras formas de vida por igual no desaparezcan, lo cual es más posible
conforma avanza el tiempo.